
El estudio pekinés liderado por Ma Yangson, MAD Architects, recibió el encargo de construir un complejo que abarca casi 700.000 metros cuadrados, denominado Parque de deportes de Quzhou, ciudad de la provincia china de Zhejiang.
Estadio Quzhou
Rodeadas de árboles, las instalaciones deportivas —que incluyen una piscina y un hotel, entre otros— se integran en un parque público donde las fachadas desaparecen mediante cubiertas topográficas vegetales transitables, recorridas por caminos peatonales.
Sutileza futurista
Incrustado con sutileza en un escenario futurista, este estadio es el primer elemento del parque deportivo en completarse. Con capacidad de 30.000 espectadores, la construcción fue diseñada para dar continuidad al paisaje sinuoso circundante. La estructura principal está formada por sesenta costillas de hormigón visto. La membrana traslúcida de politetrafluoroetileno (PTFE), más conocido como teflón, apoya sobre elementos autoportantes de acero.
Comprometida con las necesidades emocionales de sus habitantes
A partir del concepto oriental de naturaleza —vinculado al cuidado del espíritu— surge la idea de diseñar una ciudad comprometida con las necesidades emocionales de sus habitantes. Con esta premisa, el estudio pekinés plantea un parque deportivo donde las construcciones, que aparentan emerger espontáneamente o incrustarse con sutileza en el terreno, se integran en una trama orgánica para crear un poético escenario vegetal y futurista en pleno tumulto urbano.
El estadio, primer elemento en completarse, se presenta a continuación como una pieza desvelada progresivamente desde el recorrido; una liviana estructura flotante que simboliza la aparente proximidad entre el cielo y la tierra.